Hacia principios de los años 80, Tom Peters y Robert H. Waterman formaban parte de McKinsey, una prestigiosa consultora estadounidense. Luego de investigar el comportamiento de reconocidas y exitosas corporaciones, detectaron puntos en común entre ellas. Estos factores, correctamente explotados podían ser trasladados a otras empresas permitiendo alinear su estrategia con lo que ellos consideraban un modelo de excelencia. Así surge el Modelo de las 7 S de McKinsey, compuesto por siete variables fundamentales (todas comienzan con "S" en inglés; de ahí el nombre).
- Estilo (Style): No es más que la cultura de la empresa, su manera de comportarse. En general, tiene una notable influencia de las acciones de la Alta Dirección.
- Personal (Staff): Todo el personal que forma parte de la organización debe estar alineado con la estrategia, sin excepción.
- Habilidades (Skills): Son las capacidades que posee el personal, sus habilidades principales, el know how.
- Valores Compartidos (Shared Values): Es el invisible hilo que une emocionalmente a los integrantes de la organización, el cual los motiva a trabajar por una causa comùn.
- Sistemas (Systems): Se refiere a los procesos que describen al funcionamiento de la organización y la interacción entre ellos, incluyendo el flujo de información.
- Estrategia (Strategy): La estrategia es la definición de objetivos y la manera de obtenerlos.
- Estructura (Structure): Especifica cómo está organizada la empresa. Incluye la identificación de unidades de negocio, áreas, departamentos, alianzas, etc.
Haciendo, además, una analogía con el cuerpo humano podemos decir que: el estilo es la cara de la organización, el personal es la columna vertebral, las habilidades son el conocimiento, los valores compartidos son el corazón, los sistemas la sangre fluyendo y la estrategia es el cerebro.
Basados en este modelo, los autores publicaron en 1987 uno de los libros de gestión más influyentes que se conocen: En busca de la excelencia (lecciones de las empresas mejor gestionadas de los Estados Unidos), cuya lectura recomendamos. Muchas ideas interesantes surgen de su análisis:
- El uso de la razón, pero sin abusar de ella (buscando un equilibrio con la componente emocional).
- La importancia de la motivación, regida por pilares fundamentales tales como la orientación al cliente, la actitud emprendedora, los valores y la búsqueda del equilibrio entre la rigidez absoluta y la flexibilidad.